viernes, 1 de junio de 2012

Quinta Crónica

Existe un problema recurrente en varias disciplinas artísticas con el tema del “estilo” y los “rasgos de estilo”. Sucede que a veces por ejemplo a los que escriben mal, los críticos les dicen que “tienen estilo propio” y eso no es verdad, la cosa es mucho más sencilla, son horribles y punto, no crearon nada nuevo, lo que pasa es que no les sale lo viejo. De lo contrario nadie haría nada mal, seríamos todos artistas con “estilo propio” y haríamos exposiciones de “aire contemporáneo” u “óleo imaginario”, argumentando que “el arte está dentro de cada uno”, yo lo veo así y hay que imaginar las obras, ¡Pavadas! ¡Ahí no hay nada flaco! ¡Devolveme la plata!